La gran ventaja que presenta esta nueva terapia es la de carecer casi por completo de contraindicaciones formales, de poder combinarse con casi todas las energías físicas, y además potenciarlas en su accionar terapéutico.
MECANISMOS DE ACCIÓN
Los mecanismos de acción actualmente considerados son múltiples y muy variados. Simplificando, diremos que las acciones biológicas derivan principalmente de:
01. Recarga energética celular.
02. Estimulación de las defensas orgánicas.
03. Aumento de las gamma-globulinas.
04. Aumento de los leucocitos.
05. Aumento en la producción de endorfinas.
06. Acrecentamiento de la actividad del cayo óseo.
07. Mejora en la restricción hídrica.
08. Efecto analgésico sobre terminales nerviosas.
09. Aumento del flujo circulatorio regional.
10. Disminución de radicales libres.
11. Orientación de los dipolos celulares.
12. Aumento de la PO2 en las zonas de máxima intensidad de campo.
13. Aumento en la síntesis del ADN.
14. Aumento de la síntesis del colágeno.
15. Aumento en la salida de sodio en los eritrocitos.
Se ha comprobado que las fluctuaciones del campo ante el influjo de los CMPBF indican que la membrana plasmática podría traducir esta señal física en un efecto químico, el que a su vez incidiría en la actividad enzimática.
La aplicación de CMPBF a intensidades muy bajas en inflamaciones agudas experimentales demostró disminución del edema, con aumento significativo de globulinas, sin alteraciones hematológicas de relevancia.
ACCIONES BIOLÓGICAS
Como se sabe, los imanes poseen polaridad fija e inalterable. El polo sur y el polo norte. La acción de estos polos es diferente desde el punto de vista terapéutico en cada uno de ellos. Mientras que el polo sur es analgésico y antiálgico, el polo norte es miorrelajante y bioestimulante.
La acción miorrelajante consiste en devolver el tono normal a aquellos músculos que estén hipertónicos. Sobre musculatura normal no provoca hipotonía.
Existe una tendencia que considera que el valor terapéutico de los CMPBF deriva de la acción conjunta de los dos polos en forma alternante, es decir, que en los generadores la alternancia norte-sur debe ser continua y constante.
PRECAUCIONES
Se recomienda controlar constantemente al utilizarlo en pacientes con implantación de marcapasos, mujeres embarazadas durante los tres primeros meses de gestación, en pacientes con diagnóstico de tumores malignos y en portadores de metales intraorgánicos.
INDICACIONES
Si bien no es norma de esta cátedra mencionar indicaciones de los agentes electrofísicos, el caso muy especial de los CMPBF, por la juventud de esta energía de tratamiento, es que se va a mencionar especialmente su indicación en osteoporosis, su utilización ha demostrado ser uno de los tratamientos más exitosos, avalado por una vasta experiencia a nivel nacional e internacional. También es de elección en úlceras varicosas y por decúbito, y en el aumento de la circulación cerebral, demostrado por investigaciones llevadas a cabo por esta cátedra.
COMENTARIO
Siempre se dice que, cuando aparece una nueva forma de energía, ésta «cura» todas las enfermedades. A medida que su utilización se hace más extensa y hay mayor experiencia clínica, se va limitando su campo de acción hasta que queda confinado a lo que realmente le corresponde.
Hasta ahora, con los campos magnéticos pulsantes de baja frecuencia está ocurriendo un fenómeno inverso, cada vez se le encuentran nuevas aplicaciones o nuevos campos de acción.
Es muy probable que en un futuro no muy lejano los campos magnéticos de baja frecuencia lleguen a reemplazar en las indicaciones tradicionales a las ondas cortas, fundamentalmente por carecer casi por completo de contraindicaciones formales y por la ampliación de sus campos de acción.
De acuerdo con sus potencialidades presentes, es lícito pensar en este agente físico, como un elemento de aplicación cada vez más frecuente y con aplicaciones cada vez más amplias, abarcando campos de tratamiento impensados en la actualidad.
Para leer el trabajo completo sobre el tema recomendamos entrar en el enlace al pie.
http://www.elsevier.es/es-revista-revista-iberoamericana-fisioterapia-kinesiologia-176-articulo-campos-magneticos-pulsantes-baja-frecuencia-13010385